Parece que Google no quiere que los smartphones sean rooteados. La nueva actualización del sistema operativo, Android 4.5, llegaría con novedades que podrían complicar mucho la vida a los desarrolladores de aplicaciones Root. Ya ocurrió esto con el lanzamiento de Android 4.4 KitKat, pues los datos de la tarjeta de memoria pasaban a ser solo lectura, por así decirlo, y para editarlos era necesario copiarlos a la memoria del teléfono. Pues bien, con Android 4.5, ocurriría lo mismo con los archivos de la partición de la memoria del smartphone /data.
No será lo único, pues parece que ART sustituiría a Dalvik como la máquina virtual predeterminada. Esto también conllevará problemas, pues una llamada errónea con ART en funcionamiento generará muchos más problemas que con Dalvik, y eso implicará que los desarrolladores tengan que desarrollar apps con muchos menos errores. Sería positivo, de no ser porque el mundo de las aplicaciones para smartphones rooteados siempre ha implicado el lanzamiento de aplicaciones con errores.
Lo más probable es que Google quiera acabar con los desarrolladores con pocos conocimientos. Las aplicaciones que se ejecutan en smartphones rooteados cuentan con permisos de Superusuario, y podrían ser capaces incluso de acabar con nuestro teléfono inteligente. Google no querrá que usuarios con pocos conocimientos informáticos sean los que crean esas aplicaciones Root.
Fuente: XDA-Developers
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