Una de ellas fue BQ, que fue directamente comprada (al menos su división de móviles) por un conglomerado de este país.
Buscando ser rentable de nuevo
El movimiento de LG no es extraño y es que la división móvil de la empresa lleva en números rojos demasiado tiempo. Es llamativo ver cómo el coste de los terminales de esta marca es muy superior al de otros smartphones de sus rivales, no sólo de empresas como Huawei o Xiaomi, sino también de otras como Samsung.
Ahora LG ha decidido, según cuentan en Reuters, mover la fabricación de estos móviles a un país en el que hay rebajas fiscales y donde la mano de obra es mucho más barata que en su país natal, uno de los que tienen la renta per cápita mas alta del mundo.
Así pues, los dispositivos de la firma dejará de lucir el emblemático “Made In Korea” pero a cambio tendrán la oportunidad de mantenerse a flote. Esto será algo notorio sobre todo en los terminales más importantes que eran los que se fabricaban en Corea del Sur.
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