Huawei se enfrenta al gobierno estadounidense: no hay pruebas en su contra


Desde que hace algo más de una semana supiéramos que Huawei había sido incluida por el gobierno de los Estados Unidos en una lista negra y que eso impedía que hiciera negocios con compañías estadounidenses hemos visto movimientos por parte de la administración Trump y de empresas y asociaciones estadounidenses.
Lo que no habíamos visto era una respuesta clara ni del gobierno chino ni de Huawei, mas allá de algún comunicado mostrando su disconformidad.
Hoy esto ha cambiado al reclamar la empresa a Estados Unidos que ajuste su enfoque para abordar la ciberseguridad, si es que es eso lo que preocupa al gobierno americano.

Huawei quiere que se declare inconstitucional la medida aplicada


Nueve días después de las primeras noticias sobre este tema Huawei ha presentado una moción de juicio sumario ya que creen que la Sección 889 de la Ley Nacional de Autorización de Defensa (National Defense Authorization Act, 2019 NDAA) no es constitucional.
La empresa china ha exigido al gobierno que detenga la campaña contra la empresa dado que no hay pruebas de ningún tipo que expliquen las medidas tomadas.
Además, estas medidas no servirán «para que las redes sean más seguras. Proporciona una sensación de falsa seguridad y distrae la atención de los desafíos reales a los que nos enfrentamos. Los políticos estadounidenses están usando la fuerza de toda una nación para perseguir a una compañía privada. Esto no es normal y casi nunca se ha visto en la historia”, según ha comunicado Song Liuping, jefe de asuntos jurídicos de Huawei.
Song Liuping, jefe de asuntos jurídicos de Huawei.
Song Liuping, jefe de asuntos jurídicos de Huawei.
Según el abogado chino, «el gobierno de los Estados Unidos no ha proporcionado pruebas que demuestren que Huawei es una amenaza para la seguridad«.
Glen Nager, el abogado de Huawei que dirige el caso, ha indicado que la Sección 889 de la NDAA de 2019 viola la Declaración de Attainder, el Debido Proceso y las Cláusulas de Adquisición de la Constitución de los Estados Unidos. Básicamente, no se puede ejecutar una medida como esta sin pruebas.

La prohibición afecta incluso a negocios que no tienen que ver con el gobierno


Huawei se centra en una de las partes más críticas de la legislación promovida por la administración Trump, que prohíbe a su gobierno contratar u otorgar subvenciones o préstamos a compañías que compren equipos o servicios de Huawei, incluso sin conexión con el gobierno de los Estados Unidos.
También se ha hecho hincapié en la decisión del Departamento de Comercio de los Estados Unidos de incluir a Huawei en la Entity List: “Esto sienta un precedente peligroso. Hoy en día son las telecomunicaciones y Huawei. Mañana podría ser su industria, su empresa o sus consumidores”.

Huawei quiere acelerar el proceso

La audiencia sobre la moción programada tendrá lugar el 19 de septiembre pero Huawei no quiere esperar más de tres meses, tiempo en el que su imagen se ve perjudicada y su posición en el mercado erosionada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario