Hemos probado el 
Sony Xperia M2, un modelo que es un
 salto evolutivo del Xperia M al que viene a sustituir y que llega al 
mercado para posicionar en una ya más que poblada gama media de 
producto. Es más, creemos que para conocer con exactitud su calidad, lo 
mejor es compararlo con el Motorola Moto G, que es todo un referente en 
este segmento.
Lo primero que hay que decir es que este modelo llega con una pantalla de 
4,8 pulgadas,
 por lo que evoluciona desde las cuatro y, por lo tanto, demuestra que 
la compañía japonesa ha decidido apostar por el Sony Xperia M2. Por 
cierto, que el diseño en su conjunto ahora es mucho más parecido al de 
la gama Xperia Z y su ya reconocida Omnibalance. Un acierto, sin duda.

Uno de los detalles que se deben tener en cuenta para valorar en su 
justa medida al Sony Xperia M2 es que este modelo es compatible con 
redes 4G, por lo que ofrece más que otros muchos de la misma gama de 
producto. Si se valora que cuesta 
289 euros, hay que 
decir que la relación calidad/precio es buena (sin ir más lejos, el 
Motorola Moto G LTE cuesta 199 €, y este no incluye añadidos en el 
apartado del software y es un “paradigma” en este apartado).
Diseño
Comenzamos con lo que entra por los ojos en un primer momento: las 
líneas y el aspecto del Sony Xperia M2. Como hemos indicado se parece 
bastante a la gama alta de producto de la compañía japonesa, como 
demuestra que ofrece un 
botón de encendido de grandes dimensiones y que destaca por encima del resto (las ranuras están situadas tras una tapa).

Esto ya deja claro que la batería no está accesible, por lo que no se
 puede pretender cambiar esta pero lo cierto es que dota al terminal de 
un 
aspecto muy compacto. Eso sí, hay que decir que el 
terminal es más grande de lo que se podía esperar (139,7 x 71,1 x 8,6 
milímetros), algo que se comprueba en los bodes y marcos que se 
incluyen. En cuanto al peso, este es de 148 gramos, por lo que no es ni 
muy pesado ni excesivamente ligero.
 
En lo que se refiere a la experiencia de uso en el día  a día, hay 
que decir que el Sony Xperia M2 se agarra con comodidad y no tiene 
grandes fallos en lo referente a la ergonomía, incluso se transporta sin
 excesiva molestia en el bolsillo del pantalón. Un detalle que nos gustó
 es que 
el altavoz está bien situado en la parte baja 
del teléfono, algo que no siempre es así… Por cierto, que este 
componente no es precisamente el que mejor sonido emite, y no destaca en
 exceso si se compara con el de otros modelos de su misma gama de 
producto.
 
Rendimiento
Aquí hay que decir que incluye una combinación de procesador que ya 
ha demostrado su solvencia: un Snapdragon 400 a 1,2 GHz y cuatro núcleos
 y 
1 GB de RAM. Es decir, que la elección es la misma 
que la que incluye el Motorola Moto G. Por lo tanto, en un principio hay
 que esperar que su rendimiento sea, cuando menos, muy parecido.
Estos son los resultados que hemos obtenido en los 
benchmarks habituales que solemos utilizar en las pruebas de MovilZona:
		
		
- 
				  
- 
				CPU Prime
				
- 
				  
- 
				Vellamo
				
- 
				  
- 
				NenaMark
				
- 
				  
- 
				GFXBench
				
- 
				  
- 
				GFXBench-2
				
- 
				  
- 
				GFXBench-3
				
- 
				  
- 
				3D Mark
				
- 
				  
- 
				AnTuTu
				
 
Estas demuestran que se comporta bastante bien, algo que reafirmamos 
en el uso habitual ya que nos convenció plenamente (si no se cae en la 
trampa de comprarlo con, por ejemplo, el Xperia Z2). El caso es que 
detectamos una fluidez algo inferior a la del Motorola Moto G, y la 
razón para que esto sea así se debe a 
la versión Android que utiliza, que es la 4.3. Además, la personalización de la interfaz de usuario también afecta un poco, pero no mucho todo hay que decirlo.
En el apartado de la autonomía la experiencia fue satisfactoria, sin más. Pese a incluir una batería de 
2.300 mAh
 el tiempo en el test de uso continuado al 100% de rendimiento se sitúo 
en unas tres horas y quince minutos, mientras que el Motorola Moto G 
alcanzó las cuatro. Eso sí, con un uso habitual pasar un día completo no
 es un problema (ojo, que detectamos que pese al uso del Modo Stamina de
 ahorro de energía, se varía mucho en este apartado al realizar 
mediciones).
Pantalla
Y hemos dicho que el tamaño de esta es de 4,8 pulgadas que es una 
medida adecuada ya que ni es excesiva y tampoco se queda corta. Su 
resolución es de 
960 x 540 (qHD), por lo que no llega a
 la calidad de la incluida en el Motorola Moto G que es a 720p. Es 
decir, se sitúa en un punto donde iguala muchos de los terminales de 
gama media pero no destaca entre ellos, ya que su densidad de píxeles es
 de 229 ppp.

Lo cierto es que, en líneas generales, hay que decir que lo que se 
muestra en pantalla es bueno, convincente. Los textos no se leen mal y 
el brillo es lo suficientemente potente. Eso sí, detectamos 
cierta tendencia al azul
 que no favorece el visionado de, por ejemplo, películas en alta 
resolución… algo que no es lo mejor que se puede hacer con el Sony 
Xperia M2, debido a su mencionada resolución.
		
		
- 
				  
- 
				Grises
				
- 
				  
- 
				Saturación
				
- 
				  
- 
				Contraste
				
- 
				  
- 
				Blancos
				
- 
				  
- 
				Negros
				
- 
				  
- 
				Información
				
 
En exteriores no se ve mal, pero lo cierto es que con mucha luz se 
resiente bastante el panel del Sony Xperia M2. Los marcos no son 
especialmente delgados, por lo que no se aprovecha al máximo el frontal 
del teléfono. Por cierto, que los botones de control del sistema 
operativo Android están 
integrados en la pantalla, por lo que no hay ni rastro de los táctiles.
Cámara
El componente que se integra en el Sony Xperia M2 es uno con sensor de 
8 megapíxeles
 tipo Exmor RS. Este es superior a la inmensa mayoría de los que 
utilizan los teléfonos de gama media, como por ejemplo el ya mencionado 
en varias ocasiones Motorola Moto G. Pero, lo cierto, es que tampoco es 
espectacular.

Cuando la luz es buena, los resultados son convincentes, apenas 
aparece ruido y sólo detectamos algunas incoherencias en los colores. 
Cuando la luminosidad es baja las cosas cambian y 
se detecta bastante grano y los colores bajan claramente en calidad. Eso sí, como hemos indicado es de lo mejor en la gama media eso hay que destacarlo.
		
		
- 
				  
- 
				Buena luminosidad
				
- 
				  
- 
				Contraluz
				
- 
				  
- 
				Flash
				
- 
				  
- 
				Sin Flash
				
- 
				  
- 
				Detalle
				
- 
				  
- 
				Paisaje
				
 
La aplicación 
Cámara (que se ejecuta al pulsar un 
botón específico del lateral del Sony Xperia M2) es la misma que está 
presente en los terminales de esta compañía (donde también hay que 
indicar que está Walkman o Socialife), por lo que es muy completa y 
ofrece una funcionalidad en Automático realmente buena. La calidad al 
grabar es similar a la indicada a cuando se hace fotos y, también, se 
detecta que el autoenfoque es simplemente aceptable.
Conclusión
Un buen modelo este Sony Xperia M2, sin estridencias pero que es 
completo ya para un uso del día a día es más que suficiente si la 
exigencia del usuario no es máxima. Nos ha gustado bastante su diseño y 
que el 
funcionamiento en líneas generales es 
convincente. Además, la compatibilidad 4G y el tener 8 GB de 
almacenamiento son factores a valorar positivamente.
		
		
- 
				  
- 
				Cámara
				
- 
				  
- 
				Información del sistema
				
- 
				  
- 
				Escritorio
				
 
Eso sí, hay algunos detalles que son mejorables para poder ser el rey
 de la gama media. Por ejemplo, la resolución de su pantalla, que es 
sólo 
qHD. Además, la cámara no es todo lo buena que 
esperábamos al ser un terminal de esta compañía… pero el Sony Xperia M2 
responde a fin de cuentas. Un modelo que puede ser una buena opción en 
el mercado, pero que puede tener un mayor recorrido en lo referente a 
sus características y prestaciones.
A favor:
- Aceptable rendimiento
- Diseño atractivo
En contra:
- Android 4.3
- Cámara mejorable
Fotos del producto:
- 
				  
- 
				Frontal
				
- 
				  
- 
				Lateral en mano
				
- 
				  
- 
				Trasera en mano
				
- 
				  
- 
				Trasera
				
- 
				  
- 
				Botón cámara
				
- 
				  
- 
				Cámara trasera