Actualmente existen numerosas líneas de investigación que buscan alargar la autonomía de las baterías. Incluso durante los últimos años se han desarrollado alternativas que pretenden compensar la baja densidad de las baterías con un método capaz de cargar estos acumuladores de energía en el menor tiempo posible.
Mayor autonomía y más económicas
El profesor japonés Shinichi Komaba de la Universidad de Tokio podría tener en sus manos una de las soluciones más efectivas de cara a aumentar la autonomía de las baterías de smartphones. Sus estudios, centrados en el diseño y mejora de la batería de iones de sodio proponen una autonomía muy superior, además de una alternativa más económica que las actuales baterías de iones de litio.Batería estable a temperaturas por debajo de los 30 grados
Tras décadas de investigación que lograsen sortear diversos inconvenientes que plantea el sodio como elemento (estado a ciertas temperaturas), no ha sido hasta estos últimos años cuando la ciencia ha logrado aprovechar los iones de sodio como base de composición de la baterías. Sin embargo, la labor de Shinichi Komaba puede ser crucial para diseñar la batería de iones de sodio definitiva. La línea de investigación que lidera ha logrado encontrar nuevos materiales que contrarresten el peso y tamaño de los mismos a temperatura “ambiente”. La utilización de “carbono duro”, manganeso y níquel en la formación de los electrodos (ánodo y cátodo) ha logrado que el flujo de electrones del sodio hagan de esta pila una batería más efectiva para dispositivos electrónicos como los smartphones. Y es que hasta ahora tan solo eran aprovechables las baterías sodio-azufre y sodio metal haluro -Zebra-, cuya particularidad es que trabajan por encima de los 300 grados centígrados.En términos generales, las baterías de sodio prometen una autonomía entre cinco y siete veces superior a las actuales de litio con un ciclo de carga y vida útil similares. Además, la abundancia del sodio (es el sexto más abundante del planeta) no solo esquivaría la escasez de litio, sino que permitiría fabricar baterías más baratas. Esta característica a su vez es una gran noticia para otros campos donde el coste de las baterías es un impedimento para su masificación, tal y como puede ser el negocio de los coches eléctricos.
Fuente: Pocket Lint