Siempre miramos a la a organismos como la USPTO americana como el
epicentro de las patentes de la tecnología mundial pero no hay que irse
tan lejos para descubrir que las antenas fractales que utilizan casi la
totalidad de los teléfonos móviles de todo el mundo, y que acabaron con
las extensibles, son una patente de una empresa española, Fractus, que
está nominada junto a su fundador, Carles Puente, al Premio Inventor
Europeo 2014.
Siempre se habla de Motorola y de Martin Cooper como inventores del
teléfono móvil, pero poco se habla de Carles Puente, un profesor,
inventor y emprendedor español que es responsable, desde su empresa
Fractus establecida en San Cugat del Vallès, de que en los 90
desaparecieran las antenas extensibles en los móviles y adquirieran el
compacto diseño que tienen ahora. Su empresa comenzó como una spin-off
de la UPC ahora cuenta con 20 trabajadores y acumula más de 150 patentes
pero entre ellas destaca la de la diminuta antena fractal que utilizan
la inmensa mayoría, por no decir todos, los teléfonos móviles actuales.
Este es también el motivo por el que ha sido nominado al Premio
Inventor Europeo del Año 2014 además de por las de las antenas de banda
dual y por las tecnologías de antenas de teléfonos móviles y estaciones
base para los operadores. Puente compite contra unos inventores suecos
responsables del airbag para los cascos de ciclista y la empresa danesa
Aquaporin, que ha desarrollador un sistema de purificación del agua
mediante filtrado por ósmosis.
En una entrevista para RTVE explica que “una antena fractal es
una pieza metálica geométrica y en función de la geometría del metal
puede tener unas propiedades u otras en el funcionamiento. Tiene un
tamaño reducido y puede integrarse en el móvil con un mínimo impacto
ergonómico y visual, además de dar cobertura a esa multiplicidad de
bandas secuenciales que dan servicio a los usuarios y proporcionan
servicios de datos. En cuanto al alcance de la antena, va desde decenas
de metros a unos pocos kilómetros.”
Sin estas antenas no habría sido posible integrar en una sola
tecnologías como el bluetooth o el Wifi y sería necesario tener una para
cada conexión, lo que provocaría, que “tendríamos móviles con cuatro o
cinco antenas, como si fuera un erizo”.
Samsung acaba de claudicar y pagará a Fractus varios millones por infringir sus patentes
Pese a que todo el mundo sabe que Samsung mantiene un enfrentamiento
en los tribunales con Apple por las acusaciones de los californianos de
que se han infringido varias de sus patentes, menos se ha hablado del
juicio que ha evitado con Fractus y por la que el actualmente mayor
fabricante de smartphones del mundo por número de ventas ha llegado a un
acuerdo para el uso de sus patentes, aunque ya en 2009 era condenada a
pagar a la barcelonesa nada menos que 38 millones de euros de
indemnización.
A similares acuerdos han llegado gigantes de la tecnología como LG,
HTC, Blackberry, Sanyo o Sharp con la empresa de Puente para utilizar su
tecnología en sus dispositivos.
Patentes de españoles que no se registran en España
Y es que en contraste, estas patentes pese a partir de una empresa
española tienen que registrarse fuera para que reciban la protección
necesaria para hacer rentable la inversión en su desarrollo. Fractus es
la empresa española que más patentes tiene concedidas en Estados Unidos
en los últimos cinco años, compitiendo con multinacionales de miles de
empleados, comenta Puente que añade “al final las empresas y los centros
de investigación invierten en innovación y si tiene éxito en el mercado
se genera un valor económico que es justo que retorne a sus creadores y
a aquellos que han invertido.”
El profesor de la UPC realiza un llamamiento a las autoridades “me
parece muy importante que nuestro país se haga una apuesta decidida por
el sistema de patentes, y no quedarse fuera de la patente unitaria. Si
no se hace es por desconocimiento y refleja una desconfianza a utilizar
mecanismos legales para proteger.”