Hemos pasado de no saber qué era HMD a asociarla inmediatamente con Nokia. La noticia de que Nokia volvía al ring nos dejó a todos con la boca abierta en su momento, y aunque nos llevamos un pequeño chasco durante la presentación de sus primeros móviles, lo cierto es que HMD ha demostrado ser una marca de la que nos podemos fiar, pero quiere ir más allá. Tras hacerse con los derechos de la marca finlandesa, HMD ha vuelto a salir de compras y se ha hecho con los derechos de Asha.
Posiblemente no te suene tanto como la marca original, pero Nokia Asha es una de las variantes más míticas de la firma. Nokia creó esta marca en 2011, y tras dos años con ella la transfirió a Microsoft en 2013. Su línea de productos estaba compuesta por teléfonos básicos con un diseño muy cuadrado y peculiar. El más conocido de todos es el Asha 300, anunciado en octubre de 2011. Se trata de un teléfono con teclado físico alfanumérico y pantalla táctil de 2.4 pulgadas, a lo que se le añade una cámara de 5 megapixeles y radio FM.
También hubo espacio para móviles algo más avanzados que seguirían la línea marcada por Apple y el resto de firmas: “mucha pantalla” y pocos botones. Aquí destaca el Asha 500, que lanzado en octubre de 2013, montaba una pantalla táctil de 2,8 pulgadas (sí, 0,4 pulgadas más grande que la del Asha 300), una cámara de 2 megapíxeles, slot para micro SD y hasta doble SIM. Poco tenían que hacer contra Apple, y es que por estas fechas empezó el declive de Nokia que la llevó a donde todos sabemos.
De momento no sabemos qué planes tiene HMD Global con esta línea de productos. Posiblemente, teniendo en cuenta la trayectoria de Asha, sean teléfonos de gama de entrada enfocados a mercados emergentes como Africa o la India. Esto son solo suposiciones, claro está. Habrá que esperar a que digan algo desde HMD.
Fuente: Gizmochina