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En primer lugar, nos encontramos con una pantalla de 5,2 pulgadas de resolución FullHD, lo que hace una densidad de 423 pp. Cuenta con una cámara de 13 megapíxeles acompañada de una frontal de 2 megapíxeles para la videollamada y los selfies. Por otra parte, podemos ver en su cámara un aro alrededor de la misma que esconde el flash dual, con un led a cada lado, en un intento de mejorar la iluminación de las fotos con esta posición y dotar al sistema de algo más de estética. La cámara, por otra parte, es capaz de capturar vídeo en calidad 4K.
En su interior podemos encontrar un Snapdragon 801 de Qualcomm, el mismo procesador del Samsung Galaxy S5 o del Sony Xperia Z2, que alcanza hasta 2,5 Ghz y que viene acompañado de 2 GB de RAM además de 16 o 32 GB para el almacenamiento interno con una GPU Adreno 330.
En especial, este nuevo Moto X va a destacar por su diseño. Cuenta, de nuevo, con carcasas intercambiables que, además, serán de madera (bambú) o piel, pero no hablamos de “pseudo…”, sino de los materiales reales, que vendrán rodeados de un arco metálico de aluminio, el mismo material en el que viene grabado a láser el logo.
Entre sus funciones especiales para Android 4.4.4 KitKat, que es el software que incorpora, se encuentra la de unos controles de voz avanzados. Esto es, que por ejemplo le podemos pedir al Moto X que nos haga un “selfie”, que publique algo en Facebook o al darle las “buenas noches”, el solo cambiará su modo a uno predefinido con un volumen menor, o directamente sin el, para las notificaciones y llamadas.
Finalmente, también destaca su batería, pero no ya por los 2.300 mAh, que mejora en apenas 10 mAh la del Moto X original, sino por su capacidad para recargarla en 15 minutos y contar con hasta 8 horas de autonomía.
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