Estos son algunos mitos sobre Bluetooth muy extendidos pero que son completamente falsos o han quedado obsoletos.
Bluetooth es una tecnología que tiene ya muchos años,
pero pese a ello, aún son muchos los mitos sobre esta tecnología,
basados en hechos antiguos o directamente inventados.
Estos son 5 mitos sobre Bluetooth a los que no deberías hacer ningún caso.
Tener el Bluetooth encendido gasta mucha batería
Si
bien es verdad que con las primeras versiones de Bluetooth, mantenerlo
activado gastaba mucha batería, hace mucho que eso no pasa. Antes, si
tenías activado el Bluetooth, este buscaba permanente dispositivos con
los que enlazarse, de la misma forma que al tener activado el WiFi, el
móvil busca permanentemente redes a las que conectarse.
Sin embargo, desde la versión 4.0, Bluetooth es LE (Low Energy) y gracias a ello permite
buscar dispositivos consumiendo muy poca energía,
y se puede mantener enlazado sin consumir energía. En definitiva, desde
Bluetooth 4.0, la tecnología solo gasta una cantidad significativa de
energía al transmitir datos.
Bluetooth interfiere con las ondas WiFi
Tanto las ondas WiFi como las Bluetooth
operan normalmente en la banda de 2,4 GHz,
y por tanto sería lógico pensar que unas interfieren con las otras.
Pero al igual que antes, desde la llegada de Bluetooth 4.0, las cosas
cambiaron bastante, y es que a partir de esa versión Bluetooth cuenta
con cambio de frecuencia adaptativo.
Esto quiere decir que, dentro de las frecuencias de la banda de 2,4 GHz (de 2400 a 2483,5 MHz), Bluetooth puede
detectar que frecuencia queda libre y operar en ella, e incluso cambiar rápidamente de una frecuencia a otra sin obstruir el proceso de transmisión de datos.
Bluetooth tiene un alcance cortísimo
Existe el mito que el alcance de Bluetooth es tan pequeño que solo
funciona dentro de habitaciones pequeñas, pero si bien es cierto que
tiene un alcance limitado, este es bastante mayor de lo que la gente
cree. En función del tipo de Bluetooth que tenga tu dispositivo, tiene
un alcance distinto:
- Bluetooth Class 3: menos de 10 metros de alcance.
- Bluetooth Class 2: 10 metros de alcance.
- Bluetooth Class 1: 100 metros de alcance.
Aunque la mayoría de dispositivos que no funcionan conectados a la corriente utilizan Bluetooth de clase 2 o 3,
su alcance es similar al del WiFi Direct, tecnología que se utiliza muchas veces por un supuesto alcance superior al del Bluetooth que en realidad no existe.
Bluetooth es perjudicial para tu salud
Aquello de que las ondas emitidas por los smartphones son
perjudiciales para la salud es algo en lo que la comunidad científica no
termina de ponerse de acuerdo, pero que desde luego no está comprobado;
al menos de momento. En cualquier caso, y suponiendo que las ondas
fuesen perjudiciales,
el impacto del Bluetooth sería despreciable.
En teoría, si ese daño por radiación es real, sería mayor o menor en
función de la potencia con la que se envían las ondas. En Bluetooth
esa potencia rara vez supera 1 mW, algo completamente irrelevante frente a los 1000 o incluso 2000 mW del 4G.
Bluetooth es seguro mientras no seas visible
Bluetooth es y siempre ha sido una tecnología muy interesante en
concepto pero con muchos fallos en su implementación. Uno de sus mayores
problemas es su altísima
vulnerabilidad de cara a ataques de aquel quiera conectarse a tu dispositivo.
Es típico pensar que, siempre y cuando no estés visible, ningún
hacker podrá encontrarte y por tanto nunca accederá a tu dispositivo.
Pero se trata de pensamiento muy ingenuo: los hackers tienen formas de
encontrar tu dispositivo mientras el Bluetooth está encendido, incluso aunque no estés visible.
Si realmente quieres hacer Blutooth seguro, lo mejor que puedes hacer es mantenerlo apagado y
tener un buen pin para cuando lo estés utilizando.
El origen del símbolo de Bluetooth
El símbolo de Bluetooth
tiene un origen muy curioso, que viene de la época anterior a los
vikingos y con un significado muy especial.