Solo en Estados Unidos se calcula que 5.761
pantallas de móviles se rompen cada hora. No es raro ver un móvil hecho
añicos y no solo en su pantalla, si no por golpes en los laterales o
incluso aquellos daños que sufren debido a los accidente con el agua. La
solución para muchos usuarios es hacer con un
móvil ultra resistente como el nuevo Cat S52, que es actualmente una de las opciones irrompibles más completas del mercado.
La evolución de los llamados móviles rugerizados ha sido
espectacular. Hace no tantos años, estos móviles resistentes tenían un
aspecto tosco que rara vez estaban acorde con el diseño de los tiempos.
Ahora, gracias al desarrollo y el trabajo de compañas como Cat, un móvil
resistente puede camuflarse y
pasar perfectamente por un smartphone al uso, pero con todas las prestaciones y el sello de irrompible que caracteriza a la marca y sus terminales.
¿Por qué un rugerizado?
Hay muchos motivos por el cual, un móvil rugerizado como el nuevo Cat
S52 puede ser la solución para muchos usuarios. Ya sea porque tenemos
niños en casa que suelen tirar al móvil al suelo o porque
trabajemos en entornos duros de polvo, suciedad
y con posibilidades de caída, la respuesta para no llevarnos sorpresas
pasa por un terminal de estas características. El resultado será un
ahorro importante en reparaciones, y tener en nuestras manos un terminal
al que no afectará el paso del tiempo y que se mantendrá siempre como
nuevo.
Cat S52, la resistencia como ADN
El nuevo Cat S52 cuenta con
certificado IP68, lo que
le hace inmune al agua y al polvo. Esto significa que podemos meterlo
debajo del grifo sin problema, llenarlo de arena en la playa o tirarle
una taza de café, ya que seguirá funcionando como si nada hubiese
pasado. En las pruebas que realiza Cat antes de dar el visto bueno a sus
terminales, el S52 ha sido sometido a
caídas múltiples desde 1.5 metros directamente a suelos de hormigón y desde múltiples ángulos con excelentes resultados.
Parte de este éxito es el refuerzo de
aluminio de alta calidad
que rodea el terminal, contando además con una placa trasera de TPU que
ofrece un agarra antideslizante. Por si fiera poco, la pantalla está
protegida con un vidrio
Corning Gorilla Glass 6,
resistente a golpes y arañazos. El apartado de la seguridad también está
presente en este dispositivo gracias a su sensor de huella situado en
un lateral y que permite un desbloqueo rápido y seguro.
Prestaciones a la altura
Aunque su principal ADN es la resistencia y la de un móvil que durará
intacto durante mucho tiempo, el Cat S52 dispone de prestaciones que lo
posicionan como un potente smartphone. Cuenta con una pantalla
HD+ de 5.65 pulgadas, 64 GB de memoria interna (ampliable mediante tarjetas microSD) con
4 GB de RAM y una batería de larga duración compatible con carga rápida. Tampoco carece de conexiones avanzadas como el
4G o el NFC para poder realizar pagos móviles.
Fotos Made in Sony
El Cat S52 está a la altura también en el apartado fotográfico, gracias a su
sensor dual pixel de Sony
de 12 megapixels con apertura de f/1.8 y un gran tamaño de píxel de 1,4
µm. Esto proporciona un excelente rendimiento en condiciones de poca
luz, lo que le convierte en la mejor cámara del mercado para teléfonos
resistentes. Además, la calidad de los selfies también están asegurados
gracia a su cámara frontal de 8 megapixels.
Con Android 10
Otra de las buenas noticias, es que aunque el terminal ha sido
lanzado con Android 9 Pie, Cat ha trabajado duro para que ya pueda
actualizarse a Android 10
y contar con todas las ventajas y novedades del nuevo sistema operativo
de Google. Esto hace que el Cat S52 esté a la misma altura que muchos
de los smartphones de gama alta del mercado.