Hoy cumplimos 90 días desde el lanzamiento oficial de Android 9 Pie.
Analizamos como los fabricantes han ido actualizando sus dispositivos y
lo comparamos con años anteriores para determinar si es verdad que los
fabricantes se han puesto las pilas en términos de actualizaciones.
Hoy hace ya 90 días, tres meses aproximadamente, de la llegada de
Android Pie de forma oficial. Como siempre, los dispositivos de Google
fueron los primeros en recibirla, y el resto de fabricantes hicieron sus
promesas de actualizaciones.
El mes pasado hicimos un especial sobre Android 9 Pie,
sobre lo que más nos gustaba, lo que menos y algunas apreciaciones
personales. Una de las más interesantes fue la comparativa de móviles
actualizados respecto a la versión del año pasado.
Android Pie es la primera versión tras la implementación obligatoria de Project Treble.
Treble es una revolución interna en el sistema Android
que en la teoría facilitaba el proceso de actualización. En la
comunidad de usuarios hemos visto como Android Pie llegaba a las ROMs a
una velocidad demencial, lo que nos dejaba buena imagen. ¿Ocurre también
con las versiones comerciales de Android?
Tras 90 días desde el lanzamiento de Android 9 Pie, vemos que los
grandes fabricantes se han puesto las pilas. Sorprende que Essential
actualizó su móvil el mismo día que los Google Pixel, siendo el primer
móvil que no es de Google que actualiza tan rápido a una nueva versión
de Android.
Tras esta mención de honor llegan el resto de fabricantes. OnePlus ha sido la siguiente compañía en actualizar su buque insignia. Ha tardado
46 días
respecto a Google, un tiempo que consideramos correcto para, no solo
actualizar la versión de Android, sino las funciones específicas de la
capa de personalización Oxygen OS.
El tercer móvil en el podio sería el Nokia 7 Plus, con
53 días
de retraso respecto a los móviles de Google. Cuando Nokia regresó al
mercado, prometió velocidad en las actualizaciones, y de momento parece
estar cumpliendo. El Nokia 6.1 también empezó a recibir actualización a
Pie y otros modelos recibirán dicha actualización durante el mes de
noviembre.
Destaca también el ímpetu de Huawei, que lleva desde el mes de septiembre con versiones beta, y que
a nivel global ha comenzado el despliegue de actualizaciones en varios de sus terminales. Mucho mérito, si tenemos en cuenta lo compleja que es su capa de personalización.
¿Está teniendo efecto entonces las actualizaciones tras la llegada de
Treble? Una forma de medir la facilidad o dificultad de cada versión de
Android es compararlo con los móviles que se actualizaron a las
anteriores versiones de Android y cuanto tiempo han tardado en recibir
la última versión de Android.
En el caso de Android Oreo, el primer móvil que recibió la versión fue el Xperia XZ Premium, que se actualizó con
63 días de retraso respecto a los Pixel y Nexus. En los primeros 90 días, además, se actualizó el OnePlus 3 y OnePlus 3T.
Para Android Nougat, el Motorola Moto G4 fue el móvil que más rápido comenzó a actualizarse, con
61 días de retraso, seguido del LG G5 con 74 días y el Motorola Moto Z original, que comenzó a actualizar en el día 91.
Al investigar en versiones anteriores observamos que la velocidad de
actualizaciones en promedio no eran mucho más veloz, pero si que vemos
que en años anteriores, los principales fabricantes se daban muchas más.
Para la actualización a Android 6.0 Marshmallow, LG
tardó tan solo 30 días en actualizar su LG G4
a la última versión de Android, mientras que en el año anterior era
Samsung quien tardó únicamente 22 días en comenzar el despliegue del
Galaxy S5 a Android 5.0 Lollipop.
En aquellos años, había dos o tres modelos puntuales que actualizaban
muy rápido, pero eran una excepción. Era una gran época para compañías
como Motorola, LG o HTC, marcas que con el paso del tiempo han perdido
fuelle.
Otra medida estadística que podemos considerar para medir la
velocidad de actualizaciones de Android es la media de los móviles más
rápidos en actualizar. Algunos años nos han dejado varios terminales que
actualizaban muy rápido, mientras que el resto de equipos recibían la
última versión pasados varios meses.
Teniendo 10 dispositivos no Google que han comenzado el proceso de actualización a Android 9 Pie,
hemos realizado la media de días de retraso respecto a los 10 móviles que más rápido actualizaron en versiones anteriores.
Según esta media, comprobamos de nuevo que Android 9 Pie es la
versión que más rápido se actualiza en los dispositivos principales. Era
de esperar que si es la versión con más dispositivos actualizados en
los primeros 90 días, la media sería inferior, y
con una media de 57,3 días, supera con más de un mes de ventaja a Lollipop, la versión que era más rápida anteriormente, con una media de 92,2 días.
El último informe Android indica que la presencia de Android 9 Pie en
los dispositivos activos es ínfima. ¿Cómo es posible que ni siquiera
llegue al 0.1 % si es la versión que más rápido se está actualizando?
Existen varias lecturas que las estadísticas no nos dicen.
- Las estadísticas son por dispositivos activos,
no por modelos de móvil. Si una marca vende 10 modelos distintos,
actualiza 9 de ellos pero el que más vende no se actualiza, la realidad
que muestran las estadísticas es que aunque hayan actualizado 9 de 10
móviles, podríamos percibir que hayan actualizado solo 1 o 2 de 10 por
el volumen de ventas.
- Salvo honrosas excepciones como los antiguos Moto G, es la gama alta del último año la que suele recibir la máxima atención, después la gama alta del año anterior y ya el resto ya veremos cuando.
- Como el grueso de las ventas está en la gama media, y esta recibe muy poca atención, las actualizaciones tardan mucho en llegar.
- Hay móviles activos muy desactualizados: El 29 % de los usuarios de
Android tienen al menos una versión de hace 4 años o más. Sumando el
21,3 % de Marshmallow, la mitad de usuarios de Android tienen una versión con 3 años de antigüedad o más.
- Estas retenciones son acumulativas para cada año, lo que complica las estadísticas para cada nueva versión.
- Hay que considerar que las últimas cifras hablaban de más de 2000 millones de usuarios activos de Android. No hay nuevas cifras oficiales, pero damos por hecho que habrán crecido.
Principalmente, para demostrar que
nunca debemos confiar en las estadísticas y en lo que digan los titulares
(esto se aplica a nuestros propios titulares, ya que incluso el de este
artículo podría ser engañoso). Dependiendo del punto sobre el que
tomemos la información, podríamos decir que Android es un territorio sin
ley donde vas a quedar vendido. Con el estudio de hoy podemos afirmar
que hay fabricantes que si que se lo toman en serio, pero eso no
compensa una situación global.
Fabricantes como Nokia demuestran que merecen la pena ser considerados.
La cuestión es ¿realmente importa que en Android haya usuarios desactualizados en nuestro día a día?
¿Nos sirve de algo saber que hay dos o tres fabricantes que se lo toman en serio?
La respuesta depende de tus preferencias. El objetivo de este
artículo no es contradecir las estadísticas de uso, que muestran una
realidad, sino ampliar esa información para ayudarte a ti, usuario
preocupado por las actualizaciones.
Conocer cuales son los fabricantes que mejor se toman en serio Android es crucial para elegir tu próximo móvil.
Cada nueva versión de Android tiene fabricantes que se lo toman más o
menos en serio, y revisar quienes son los fabricantes que mejor se
portan con las actualizaciones
nos da una mejor perspectiva sobre quien se toma más en serio Android.
Importante también tener en cuenta qué hacen estos fabricantes con sus
gamas más antiguas o menos prestigiosas. De poco sirve recomendar Huawei
porque actualiza sus Mate a alguien que se vaya a comprar el móvil más
barato.
Los datos de este estudio los hemos recopilado en base a la fecha
de comienzos de despliegue de actualizaciones de cada fabricante. Las
actualizaciones son un proceso progresivo, y en ocasiones algunos
fabricantes comienzan a actualizar en un país y no llega a todo el mundo
hasta pasado varios meses. Incluso cuando una actualización es
anunciada a un país, puedas tardar semanas en recibirla. La
investigación sobre las fechas de actualización se ha realizado con el
mayor rigor posible, pero puede contener errores.